3 abril, 2019

Armenia en bicicleta, a la sombra del monte Ararat


Armenia es uno de esos destinos poco conocidos que despierta la curiosidad de viajeros que buscan una experiencia distinta. Un patrimonio cultural único en un paisaje rural y montañoso que conserva el encanto de otros tiempos, y un terreno ideal para una aventura a pie o en bicicleta, disfrutando de la rica gastronomía tradicional y de la hospitalidad de sus habitantes.

Sergio Fernández, del Reto Top Cable 7 Desiertos, nos propone un viaje de es- píritu aventurero por Armenia. Lo hace a partir de su experiencia el pasado ve- rano, en que pedaleó y caminó durante tres semanas por este “pequeño pero sorprendente país de orografía monta- ñosa, repleto de lugares por descubrir y en el que sus gentes son el verdade- ro tesoro de esta tierra”.

ENTRE MONASTERIOS MILENARIOS

Al planificar un viaje por Armenia resulta prácticamente imposible obviar el poder de atracción de sus célebres monasterios, como el de Khor Virap, -a los pies del monte Ararat- en el que Gregorio el Iluminador, pasó encerrado catorce años a finales del siglo III. O el de Tatev, del siglo IX, edificado sobre un desfiladero de basalto en el sureste del país. O el de Tatevi Anapat, oculto al final de una frondosa garganta bañada por un río de aguas tibias, y habitado hoy día por un único monje.

Aunque de innegable interés, los monasterios no son, ni mucho menos, el único atractivo del país. Armenia es un auténtico paraíso para los aficionados al senderismo y el montañismo.

 


MONTE ARAGATS, UN “CUATROMIL” DE CUATRO CUMBRES

El monte Aragats, de 4.090 metros de altura, es el actual techo de la nación. El acceso es realmente fácil, pues esta montaña multicolor de origen volcánico se encuentra a sólo 50 km de la capital, Ereván. Además, una carretera estrecha pero bien mantenida permite llegar hasta el lago Kari, situado a 3.200 metros de altitud, que sirve de campamento base para acometer la ascensión a cualquiera de las cuatro cimas de la montaña. De todas ellas, la más asequible es la sur, de 3.888 metros, a apenas dos horas de ruta desde la orilla del lago.

La compañía de guías locales Wild Armenia (wwww.wildarmenia.com) organiza salidas de cinco días que enlazan la ascensión a las cuatro cumbres del monte Aragats después un período de aclimatación explorando el macizo de Geghama, en el que habitan familias de la minoría étnico-religiosa Yazidi, y que se levanta entre la llanura del Ararat y el inmenso lago Sevan.


SENDERO TRANSCAUCÁSICO, UNA APUESTA DE FUTURO

El Cáucaso es una de las regiones más ricas del planeta a nivel biológico, cultural y lingüístico, además de una de las menos exploradas. Coronada por imponentes cumbres, la cordillera caucásica atesora un extraordinario patrimonio en forma de red de antiguos senderos que comunicaban valles por pasos que todavía hoy permanecen in- alterados, de manera que el senderista que se aventura por ellos siente la esencia del verdadero viaje.

Aunque todavía no es una realidad, el Transcaucasian Trail (www.transcaucasiantrail.org) pretende convertirse en los próximos años en un sendero de larga distancia homologado inter- nacionalmente. Cuando esté terminado, sumará más de 3.000 km uniendo una veintena de parques nacionales y áreas protegidas pertenecientes a Rusia, Georgia, Azerbaiyán, Armenia, Turquía e Irán. Un sector ya transitable se encuentra en el parque nacional de Dilijan, en el norte de Armenia.


AVENTURA A PEDALES EN ARMENIA

Viajar en bicicleta por Armenia implica adentrarse en valles remotos y superar collados que serpentean más allá de los 2.000 metros de altura. Para llegar a los enclaves más apartados, hay que estar dispuesto a pedalear con el plato pequeño, a caminar en algún que otro momento e incluso empujar la bicicleta si la cuesta se dispara.

Los cicloviajeros con experiencia no tendrán ninguna dificultad para viajar por cuenta propia. Una incipiente oferta de bed & breakfast y agroturismos permite alojarse en casas de acoge- doras familias que nos mostrarán su estilo de vida y costumbres, además de agasajarnos con su sabrosa gastronomía. A la hora de avituallarse, incluso en las aldeas más aisladas siempre es posible encontrar queso artesano, miel, fruta y lavash, el pan tradicional, que se prepara sin levadura.

Si se pre ere viajar en grupo y con guías locales, la agencia local Silk Road Armenia (www.silkroadarmenia.am) organiza tours de una semana, con vehículo de asistencia, alojamientos, visitas a lugares de interés, etc.